Cómo van ? :)
Bueno, estaba pensando qué podía publicar para ustedes, y, se me ocurrió mostrarles un mini - libro que estoy leyendo, más que un libro, es una guía, es divertida, recién acabo de leer el primer capítulo, por decirlo así, y se los quiero compartir.
Es gracioso, no ?
Mamá me lo trajo ayer en la noche, me pareció raro que me lo trajera, pero, hoy cuando me levanté lo leí, y es divertido, habla profesionalmente sobre los zombies, como dando una introducción para conocerlos mejor.
Quiero compartirla con ustedes.
LOS MUERTOS VIVIENTES
Un zombie ya no es un ser humano: es un cuerpo reanimado de un modo todavía inexplicable pero reconocible como una enfermedad o un fenómeno natural. No hay nada de mágico en el estado zombie, pese a las leyendas que circulan en Haití, que deben ser tomadas como mitos, más emparentadas con el golem -un objeto animado por un demiurgo- que con la enfermedad terminal, contagiosa y estudiable que crea un muerto viviente.
Lo más probable es que los zombies sean víctimas de un virus transmitible, que es perfectamente contagioso y siempre es mortal: no existe tal cosa como la inmunidad natural. El contagio no es por vía aérea sino por los fluídos, lo que explica que la mordedura de un zombie garantiza la enfermedad en la víctima. Los animales no se contagian de esta afección específicamente humana, pero mueren si reciben el virus, sea por la mordedura de un portador o por comer ellos mismos la carne de un zombie.
El contagio sólo funciona entre los vivos y no reanima a un muerto, que sólo sirve como "alimento" para los zombies. Esto es por el funcionamiento de la dolencia, que aparece como una especie de gripe aviaria -fiebres, dolores en el cuerpo, decaimiento extremo- que culmina en la muerte en un plazo de menos de un día. Esta muerte, real, física, es apenas la primera etapa del proceso.
Entre tres y cuatro horas después de la muerte el cadáver, a menos que su cerebro sea destruído, se reanima. El ser así nacido no es la persona que murió sino su cuerpo activado de un modo particular. Lo único que se reanima, en rigor, son las funciones básicas del cerebro, excluyendo todo lo que conserve la personalidad de la víctima. El resto del cuerpo responderá solamente a los impulsos más básicos del cerebro, con todas las funciones superiores anuladas.
En rigor, el cuerpo sigue muerto y se mueve por razones desconocidas mientras decae más lentamente, ya que la dolencia demora la necrosis hasta por cinco años. El zombie no siente nada: dolor, hambre, deseo, tristeza, alegría, frío, sed, ya que su cuerpo nada necesita y su cerebro nada registra. Es un ser animado únicamente por la pulsión de cazar y atacar humanos vivos y por un inexplicable nomadismo que puede crear verdaderas migraciones de zombies.
Este peculiar estado -cuerpo reanimado sólo en sus funciones básicas, carencia completa de memoria y personalidad, necrosis demorada pero real- explica las características del zombie como enemigo. Sus movimientos son descoordinados por la incapacidad de realizar funciones complejas como correr y saltar. Su visión es normal, pero la incapacidad de procesar información compleja del cerebro explica que no cruzen ni siquiera una zanja baja si está llena de agua -no pueden juzgar la profundidad y literalmente no entienden qué es esa superficie brillante- y sólo perciban realmente el movimiento, lo que da pie a peligros y técnicas de supervivencia a discutir más adelante.
Lo que no hay duda es que el oído y el olfato del zombie son excelentes, lo que probablemente se explica por la ubicación de estos sentidos en el cerebro. El zombie no es un ser visual como nosotros, sino uno preparado para una sola función, la de la cacería.
Interesante, no ?
Y eso que recién empiezo a leerlo.
Tal vez escriba algo más sobre estos seres más adelante.
Saludos !